Biotransmisiones FM

Performance  por Colectivo Electrobiota (Gabriela Munguía y Guadalupe Chávez)

La performance consta de una exploración sonora que emerge de un encuentro sensible con los territorios rizosféricos. A partir del desarrollo de biotransmisores DIY se sonorizará la actividad eléctrica de los suelos, donde estas frecuencias de alteridades oscuras serán retransmitidas vía frecuencias moduladas hackeando y expandiendo las redes de comunicación humanas u otras frecuencias y ritmos no humanos. A modo de un gran red híbrida orgánica radiofónica, raíces, hongos, bacterias, minerales, el agua y diversos flujos se enredarán en constantes impulsos simbióticos y de cooperación.

Electrobiota (Mx) es un colectivo multiespecie y laboratorio de experimentación artística fundado en el 2014 por las artistas transmediales mexicanas Gabriela Munguía Guadalupe Chávez. Contextualizadas en el hacer y pensar latinoamericano y desde múltiples acercamientos propios de las artes electrónicas, el bioarte, las humanidades ambientales, la biología cultural, la recuperación ancestral y las epistemologías del sur investigan posibles expresiones y gestualidades interespecies. Juntas coordinan el Laboratorio Rizosférico, proyecto de educación experimental sobre medioambiente, arte y tecnologías abiertas. Su producción ha sido exhibido en distintos festivales y muestras internacionales como es la Bienal Kosice (Ar); la Bienal Internacional de Arte Contemporáneo de América del Sur (Ar-Br); Festival Transpiksel (Mx); Piksel Festival Art, Science and Free Technology (No); Teheran Annual Digital Art Festival (Ir); Cairotronica Festival of New Media Art of Cairo (Eg), Transitios MX Festival Internacional de Artes Electrónicas y Video (Mx), ECOSS, Biotecnología, Arte y Transfeminismo (Es), Festival Tsonami de radio arte (Ch), entre otros. Su trabajo ha recibido diversos reconocimientos internacionales y nacionales, recibiendo recientemente el premio  CIFO-Ars Electronica.

Actividad presentada en el marco de la exhibición Al conjuro de este código. Tecnofeminismos para reescribir el mundo